Alfredo Pascual 26/11/2012
En una semana y sin invertir un solo euro. Así ha creado un ingeniero, parapetado tras el pseudónimo de 'Tijuinem', un clon funcional de la nueva web del Senado, en la que se invirtieron 437.481 euros del dinero público. 'Tijuinem' explica en la documentación
En una semana y sin invertir un solo euro. Así ha creado un ingeniero, parapetado tras el pseudónimo de 'Tijuinem', un clon funcional de la nueva web del Senado, en la que se invirtieron 437.481 euros del dinero público. 'Tijuinem' explica en la documentación
del proyecto que su única intención es demostrar, "por principios", que
se podrían haber aprovechado las virtudes del 'open source' para
reducir el costo general del desarrollo. No quiere desvelar su identidad
para que no se desvíe un ápice de atención sobre su objetivo, mostrar
el potencial de las herramientas de 'software libre'.
Como es natural, el grueso de la rebaja gira en torno al pago de licencias de software. La web clónica de la cámara alta, ya online aunque sin terminar, se vale de programas tan potentes como MySQL, Apache o LAMP que no solo igualan las prestaciones del mejor software comercial, sino que para muchos expertos las supera en determinados aspectos.
De este modo 'Tijuinem' se permite presentar mejoras como: automatizar el sistema de actualización de las fichas de senadores ("no está completamente integrado en una base de datos, el programador ha de actualizar manualmente"), implementar las redes sociales ("no se ha integrado el sistema de redes sociales, simplemente se ha creado un acceso directo al perfil oficial en Twitter y nada más") e incluso hallar un software gratuito "mucho más avanzado" que el empleado para la visita virtual que permitiría corregir "las deformaciones en las esquinas y sistemas angulares".
Nuevos errores
Por el camino el ingeniero ha topado con más errores de los que los ciudadanos han venido detectando en la última semana. Y es que la web del Senado va camino de convertirse en el más escrutado de los concursos públicos. El más sorprendente de la nueva remesa de fallos radica en que no se haya optimizado la web para buscadores: "Lo que se conoce como SEO (Search Engine Optimization), en este caso se ha comprobado que este trabajo no ha sido realizado. Se supone que las empresas contratadas lo harán más adelante según vayan actualizando contenidos. Creación de sitemaps, urlist, robots, bots, etc. Optimización de etiquetas y tags en el código fuente y todo el sistema de ficheros necesarios para autentificar la web en Google, Bing, Alexa, Yahoo, etc. Se ofrece desarrollar este apartado de forma gratuita", explica en autor.
Otro avance importante que plantea 'Tijuinem' es la tienda online. La web del Senado se queda a la mitad diseñando su tienda, pues ofrece un catálogo de productos sin la posibilidad de comprarlos directamente. La nueva versión incluye una tienda con un sistema de conexión segura (HTTPS) y la posibilidad de pagar a través de tarjeta de crédito, PayPal, transferencia bancaria... sin coste alguno.
El resultado es una web con peor acabado y funcionalidad que la actual, pero con una base que bien podría haber servido al Gobierno para ahorrar más de 200.000 euros en desarrollo de aplicaciones y pago de licencias a terceros por un software que, en todos los casos, dispone de una alternativa libre y gratuita.
El software libre en España
La situación del 'software libre' en España no es tan mala como parece. De hecho nuestro país se sitúa a la vanguardia europea en su uso en Administraciones Públicas solo por detrás de Alemania y Francia. Según el último informe redactado por CENATIC, más de la mitad (54%) de las instituciones recurrieron al 'open source' para realizar alguna tarea. No obstante la distribución es irregular. Solo Madrid, Cataluña, Castilla- La Mancha y Andalucía acumulan el mismo volumen de uso de estos programas de código abierto como las otras trece restantes.
Además, casi la mitad (45%) de las instituciones públicas que ahorran en licencias de software son hospitales, mientras que en el ámbito de la Administración General del Estado el porcentaje cae hasta el 37%.
Como es natural, el grueso de la rebaja gira en torno al pago de licencias de software. La web clónica de la cámara alta, ya online aunque sin terminar, se vale de programas tan potentes como MySQL, Apache o LAMP que no solo igualan las prestaciones del mejor software comercial, sino que para muchos expertos las supera en determinados aspectos.
De este modo 'Tijuinem' se permite presentar mejoras como: automatizar el sistema de actualización de las fichas de senadores ("no está completamente integrado en una base de datos, el programador ha de actualizar manualmente"), implementar las redes sociales ("no se ha integrado el sistema de redes sociales, simplemente se ha creado un acceso directo al perfil oficial en Twitter y nada más") e incluso hallar un software gratuito "mucho más avanzado" que el empleado para la visita virtual que permitiría corregir "las deformaciones en las esquinas y sistemas angulares".
Nuevos errores
Por el camino el ingeniero ha topado con más errores de los que los ciudadanos han venido detectando en la última semana. Y es que la web del Senado va camino de convertirse en el más escrutado de los concursos públicos. El más sorprendente de la nueva remesa de fallos radica en que no se haya optimizado la web para buscadores: "Lo que se conoce como SEO (Search Engine Optimization), en este caso se ha comprobado que este trabajo no ha sido realizado. Se supone que las empresas contratadas lo harán más adelante según vayan actualizando contenidos. Creación de sitemaps, urlist, robots, bots, etc. Optimización de etiquetas y tags en el código fuente y todo el sistema de ficheros necesarios para autentificar la web en Google, Bing, Alexa, Yahoo, etc. Se ofrece desarrollar este apartado de forma gratuita", explica en autor.
Otro avance importante que plantea 'Tijuinem' es la tienda online. La web del Senado se queda a la mitad diseñando su tienda, pues ofrece un catálogo de productos sin la posibilidad de comprarlos directamente. La nueva versión incluye una tienda con un sistema de conexión segura (HTTPS) y la posibilidad de pagar a través de tarjeta de crédito, PayPal, transferencia bancaria... sin coste alguno.
El resultado es una web con peor acabado y funcionalidad que la actual, pero con una base que bien podría haber servido al Gobierno para ahorrar más de 200.000 euros en desarrollo de aplicaciones y pago de licencias a terceros por un software que, en todos los casos, dispone de una alternativa libre y gratuita.
El software libre en España
La situación del 'software libre' en España no es tan mala como parece. De hecho nuestro país se sitúa a la vanguardia europea en su uso en Administraciones Públicas solo por detrás de Alemania y Francia. Según el último informe redactado por CENATIC, más de la mitad (54%) de las instituciones recurrieron al 'open source' para realizar alguna tarea. No obstante la distribución es irregular. Solo Madrid, Cataluña, Castilla- La Mancha y Andalucía acumulan el mismo volumen de uso de estos programas de código abierto como las otras trece restantes.
Además, casi la mitad (45%) de las instituciones públicas que ahorran en licencias de software son hospitales, mientras que en el ámbito de la Administración General del Estado el porcentaje cae hasta el 37%.
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